jueves, 19 de agosto de 2010

LA LECCION DEL SALITRE




La gran lección que nos entrega la explotación del salitre, es la ninguna previsión que se tomó para proteger el desarrollo de este territorio. Cuando murió el salitre, como producto de primera exportación murió también de alguna manera el norte como se conocía hasta esa época, murió la vida comercial e industrial que se desarrollaba con entusiasmo y vivacidad en estas tierras desoladas. Las personas debieron emigrar nuevamente, esta vez de regreso al sur. Las calles comenzaron a quedar vacías y los cerros y salares que una vez valieron una guerra, ya no representaban ninguna utilidad, excepto recordarnos nuestro propio pasado, en que veleros y vapores esperaban pacientemente su turno de ser estibados en los puertos del norte.
Pero muchos historiadores reconocen los años del salitre como “prósperos”. Acaso entonces entendemos que la prosperidad para la región y su gente en esa época fue comprar casimir en las pulperías o zapatos elegantes que hacían juego con el color de los ternos que llegaban en serie a los estantes de sastrería de esos abusivos comercios de la pampa.
Cuanto dinero del salitre se fue de esta tierra para convertirse en mármol elegante en alguna mansión santiaguina de la plaza Italia arriba. Cuanto salitre costaron los palacios de verano de Viña del Mar, que competían en opulencia y lujo, con las más finas mansiones europeas. Contrastando así brutalmente con las humildes casas de la pampa o las ciudades costeras que vivían del embarque del hasta entonces irremplazable oro blanco.
Cuando dinero quedó para siempre en los castillos ingleses o en las opulentas fiestas y salones del Hotel Ritz sede recreacional de John North, el rey del salitre chileno. O en las elaboradas arquitecturas de las mansiones de los comerciantes y banqueros salitreros de Nueva York, que también ganaron de estas riquezas chilenas.
Podemos hoy excusar a esos chilenos que teniendo el poder, no supieron visualizar el futuro sin el salitre y pensaron que su utilidad y precio sería eterno. Podemos excusar su decidía a estos territorios inexplorados ocultos, solitarios, constantemente ensangrentados y tan alejados de su cultura de hombres de campo en que el verde de los árboles aparecía a cada segundo en sus memorias de huasos santiaguinos. Esas autoridades, esos chilenos del centro, ganadores de una guerra, poco y nada tenían en común con el norte, es más, muchos de sus hijos y nietos habían muerto defendiendo un territorio que hoy solo les debía la vida de sus familiares.
Esas autoridades esos chilenos los pensadores e intelectuales de esa época pueden estar escusados por su ceguera histórica, no pensar en el futuro y ver solo a Chile como un país que empezaba en Copiapó y terminaba en el Archipiélago de Chiloé. Ellos obtuvieron lo mejor que se pudo de un territorio hostil que poco o nada les significó.
Pero esa misma condescendencia histórica no se puede tener actualmente con quienes dirigen y piensan la región y el país, así como con nosotros mismos que habitamos estas tierras y hemos en la actualidad, generado un sentimiento cultural propio. Así como la más variada representación en los más distintos campos del quehacer nacional.
La tragedia del salitre se yergue como un fantasma calichero que rechina cada cierto tiempo en nuestros oídos, a cada paso y recorrido que damos por el desierto. Allí están estos metálicos huesos de ballena calichera nortina oxidándose con los aires de la camanchaca. Allí están los adobes heroicos desmoronándose silenciosos y callados de regreso al mundo de arena y ripio que los vio nacer.
El pasado tiende a recordarnos el futuro, ya se escribía en el diario “El Ferrocarril” que la región se había transformado “En una especie de pequeña parte de la India Inglesa usufructuada por una multitud de sociedades anónimas organizadas fuera de Chile, sin ningún interés nacional, dejando a la nación una soberanía más nominal que real”. Además el propio presidente Balmaceda decía en un discurso pronunciado en Iquique “La propiedad particular es casi toda de extranjeros y se concentra activamente en individuos de una sola nacionalidad. Preferible sería que aquella propiedad fuera también de chilenos…”.
El salitre, su historia y sacrificio nos dice hoy que después de 70 años de cobre debemos generar un debate ciudadano, como se hizo en el pasado con grandes luchadores tales como: Eduardo Frei, Salvador Allende, Radomiro Tomic, Jonás Gómez, Andrés Savella, José Papic, Héctor Rojas Albornoz, Gonzalo Castro Toro, Ramón Silva Ulloa, Juan Luís Mauras, que aborden con valentía y transparencia nuestro futuro junto al cobre y después del cobre. No debemos ni podemos cometer el mismo error dos veces, la región, el país, nuestros hijos y nietos nos pedirán más temprano que tarde cuenta de nuestras acciones… y esta vez no tendremos excusa.


Fraternalmente



Ricardo Rabanal Bustos
Profesor

domingo, 15 de agosto de 2010

REMECER A CHILE



Sin duda el Plan Estratégico para el PDC, es un instrumento interesante que llama a la reflexión y no pretende definir la línea política de la DC, como el mismo documento lo dice, al mismo tiempo creo importante aportar ante todos mis camaradas algunas consideraciones para un real debate partidario.

Todos asumimos voluntariamente y con conciencia de organización política histórica, nuestro deber como militantes Democratacristianos, perseverando en la búsqueda de una organización interna más moderna y transparente que permita el pleno desarrollo y participación de todas las visiones del partido, dando paso a la aparición de nuevas ideas y liderazgos en un clima de respeto y fraternidad partidaria.

¿Pero solo bastará con aquello?....Desde luego que no… es aquí donde el mundo de las ideas y la voluntad política deben hacerse presente. Fuimos en una época, capaces de remecer a Chile desde sus cimientos, haciendo las transformaciones más revolucionarias y profundas que tal vez se hayan realizado en la historia de Chile. En cada sector de la nación: minería, educación, salud, economía, campesinado, organizaciones y derechos civiles, etc., dejamos volar nuestros sueños de justicia y libertad en dirección al país que habíamos soñado.

Los liderazgos sólidos y valientes que fundaron nuestro partido o que este produjo mas tarde, nos señalaron el camino, mediante el debate y la reflexión que cada militante en conciencia debía hacer y pusieron claridad a las grandes transformaciones que en el país necesitaba con urgencia para una época en que la violencia como vía para alcanzar el poder era validada por algunos sectores políticos de izquierda. Jamás nos alejamos de los valores, la moral y la ética que nos señalo la Iglesia y en muchas ocasiones logramos con mucho orgullo ser su voz, en el mundo de la política y el gobierno.

El partido entonces llevó la voz del conocimiento y la razón a los miles de chilenos que escucharon con claridad los argumentos técnicos y políticos de la Democracia cristiana Chilena, nos guiaba entonces la paz y la verdad, no las encuestas pasajeras, sabíamos lo que le hacía bien al Chile profundo y permanente en el tiempo. Nuestros líderes ya habían recorrido el país una y otra vez denunciando las injusticias de la pobreza y la desigualdad en una nación bendecida de la mano de Dios. Esa fue la tarea a la que se dieron nuestros padres fundadores durante muchos años solo armados con la solidez de sus argumentos, la claridad y elocuencia de sus palabras y la convicción interna de que su único compromiso era con la nación chilena.

Pero en estos años, algo nos paso en el camino, el triunfo de la derecha no radica en la imposición de sus ideas en los años de dictadura, sino que en la continuación del modelo mientras nosotros fuimos parte del gobierno, tratamos de matizar el sistema con algo de humanidad, es cierto , pero esa consigna y esfuerzo no resulto, las diferencias sociales ya estaban claramente establecidas y la derecha detecto mas temprano que tarde nuestras debilidades y titubeos en materias y áreas en las cuales antes nunca tuvimos dudas , sacándole de inmediato provecho a las debilidades y vacilaciones de un partido alejado de su propia doctrina, ideología he historia reciente. Mientras tanto como partido la perdida del sentido fraterno y solidario, la renuncia a la continuidad histórica con la DC de las grandes transformaciones y la incapacidad de distinguir entre lo trascendente de lo urgente, nos fue lentamente sumergiendo en disputas internas que ancladas en personalismos casi faraónicos que rápidamente renunciaron al mundo de las ideas para entrar al de las querellas y odiosidades personales debilitaron y disminuyeron aun mas nuestra querida DC.

Desde el principio de los ’90, sabíamos en conciencia lo que teníamos que hacer y no lo hicimos, ni nos dimos a la tarea de hacer conciencia a las nuevas generaciones de chilenos de lo que había pasado con los derechos conquistados y como estos se habían perdido en los años en que solo el mercado por la fuerza debía existir:

Un estado empequeñecido, sin recursos, con escasa voluntad de hacerse fuerte y protector y que además nosotros mismos ayudamos a desmantelar entregándole lo poco y nada que quedaba de su patrimonio saqueado, a los grupos económicos que hoy exhiben junto al poder económico alcanzado en ese tiempo, el poder político que en la actualidad casi a manera de burla o estrategia política levanta las propias banderas de la concertación para confundir mas a un Chile alejado del mundo partidista y programático que en su lejanía voluntaria lo ve todo igual.

El cobre, la viga maestra de la economía, como la llamó el Presidente Eduardo Frei Montalva, después de tantas luchas y toma de conciencia, nuevamente en manos extranjeras, generando fortunas inmensas en el extranjero y Chile sin la más mínima participación en la propiedad de estos yacimientos, todos ellos en manos de las nuevas Anacondas Company del Bicentenario…. olvidando la gran lección del salitre donde después de tenerlo todo solo nos quedaron las ruinas de las salitreras olvidadas en el desierto. Es aquí donde las palabras de Radomiro Tomic, “Quién controla el cobre, controla Chile”. Alcanzan una dimensión profética al ver la fuerza económica y política que han alcanzado estos grupos económicos, que no dudan en infiltrar al mundo político o alzar sus voces y golpean la mesa cuando algo no les parece bien mostrándose claramente como un poder real, existente en el Chile actual

Un sistema de pensiones que enriquece solo a sus dueños, entrega pensiones miserables a sus cotizantes y no deja participar al estado en una competencia legítima. Además le niega al ciudadano la posibilidad de elegir entre un sistema de cuenta individual o un sistema colectivo y solidario de pensiones respaldado y administrado por el fisco Chileno.

Aceptamos también un sistema de salud privado casi sin regularizaciones que castiga la maternidad, las enfermedades y a los enfermos y que intenta deshacerse rápidamente de los ancianos cuando ellos se vuelven mas vulnerables y costosos para el sistema. Todo esto afecta fundamentalmente a nuestra clase media, históricamente representada por la DC.

Un mundo del trabajo que ha sido abandonado por el partido. Junto a la importancia de la sindicalización como valida e histórica herramienta de los trabajadores para luchar contra los abusos patronales y dar justicia y equidad a la distribución de los ingresos en donde Chile muestra cifras de tremendas desigualdades que ofenden a nuestra propia historia y doctrina. Este vital espacio social fue dejado en un segundo plano y entregado a sectores más radicalizados que terminan alejando al grueso de los trabajadores.

Una vez fortalecimos y reformamos la educación pública, la entendíamos como el lugar donde el conocimiento, la excelencia y la igualdad encontraban su lugar común, dándole diálogo y entendimiento a la sociedad. Con nuestra reforma educacional logramos que al interior de la sala de clases se formaran alumnos y ciudadanos con un sentido social, crítico y colectivo que entendían el valor del bien de la comunidad por sobre el individualismo exacerbado. Hoy en día el sistema educacional replica y aumenta las diferencias sociales con insospechadas consecuencias para el futuro clima social de Chile…..y el debate solo se centra en los resultados académicos y no en una visión completa del sistema como lo hicimos en antaño.

El próximo debate político en nuestra junta nacional del 28 de mayo, debe dar paso al mundo de las ideas en planteamientos sobrios y de contenido que pretendan dar claridad al futuro de la DC en su rol de oposición, basta de discursos rimbombantes abundantes en palabras y carentes de ideas, siempre dichos por los mismos personajes en horarios estelares, en una especie de competencia de quien saca mas aplausos o vítores de la concurrencia. Todos estamos consciente de que es el tiempo de ser oposición, no basta ahora con ser constructivos y buenos fiscalizadores eso a esta altura es obvio, el desafío actual radicara en lo que seamos capaces de proponerle a Chile como DC… para que Chile vuelva a confiar en nosotros y tener la claridad como partido de generar en los nuevos liderazgos, los camaradas que le señalen un camino al país con la valentía y la consecuencia política de todos los camaradas anónimos y públicos, humildes y poderosos que hicieron grande este querido partido .

Fraternalmente



Ricardo Rabanal Bustos
Presidente Comunal PDC
Antofagasta


Democraciacristiana II Región ……..En la senda de Radomiro Tomic y Edmundo Pérez Zujovic